AÑO XVII
Diciembre
2023
43
Odio

La extimidad del odioamoramiento

Pía Liberati

Fragmento de El jardín del amor, de Rubens

"Eso que hoy, para ustedes, no vacilo en escribir odioamoramiento es el relieve que el psicoanálisis supo introducir para situar la zona de su experiencia".
J. Lacan[1]

La propuesta de este número de Virtualia, que se puede captar desde el título elegido, resuena con la formulación de Lacan que encontré como epígrafe para mi contribución. Si bien el neologismo odioamoramiento aparece avanzada su enseñanza, las referencias al amor y al odio se encuentran en diferentes momentos de su elaboración y ofrecen así la posibilidad de abordarlas desde variadas perspectivas.

La tríada de las pasiones: amor, odio e ignorancia

En su primer Seminario, Los escritos técnicos de Freud, Lacan señala que las tres pasiones fundamentales, el amor, el odio y la ignorancia, se inscriben en la dimensión del ser. En ese momento de prevalencia de lo simbólico, de la falta-en-ser y del Otro, articula los tres registros con las tres pasiones: "En la unión entre lo simbólico y lo imaginario, esa ruptura, esa arista que se llama el amor; en la unión entre lo imaginario y lo real, el odio; y en la unión entre lo real y lo simbólico, la ignorancia".[2]

Es muy interesante este planteo, ya que anticipándose a su propia elaboración que vendrá mucho después, anuda de una manera original a las tres pasiones y al mismo tiempo se distancia de lo que Freud había situado como ambivalencia, respecto al amor-odio. Al articular la ignorancia ‒como pasión del desconocimiento‒ con las otras dos, se puede leer allí ese punto de rechazo de lo que es goce en cada ser hablante, el amor y el odio en tanto afectos en el cuerpo y el hecho de no querer saber nada sobre ese goce que, sin embargo, es lo más propio de cada uno. Es lo que J.-A. Miller ha elaborado alrededor del concepto de extimidad. Retomaré este punto.

Odio al goce y amor narcisista

Lacan se separa de la perspectiva freudiana respecto a la primera identificación constitutiva. En el comienzo no está el amor al padre, tal como lo desarrolla Freud; es el odio el que está en el principio de toda identificación posible, en el acontecimiento de cuerpo primordial, que es la invasión por el goce Otro, el traumatismo del goce.

Eric Laurent, en una entrevista hacia el IX ENAPOL, precisa que "hay, en nuestra relación con el mundo un rechazo del goce malo, del cual me encuentro siempre separado. Así, el odio es simultáneamente un residuo ineliminable, aunque se encuentra desde el origen en el centro de nuestra relación con el Otro [...], en el comienzo, no está el amor al padre, sino un odio al goce y un amor narcisista en el reconocimiento de una imagen que habría desterrado a ese goce malo".[3] Podemos decir que la manera como el cuerpo se articula con el odio es justamente el modo como el cuerpo se articula con el goce.

"Los cuerpos atrapados por el discurso"

"[…] sepan que lo que crece, que aún no hemos visto hasta sus últimas consecuencias, y que arraiga en el cuerpo, en la fraternidad del cuerpo, es el racismo".[4] Esta cita es de la última clase del Seminario 19, titulada justamente como designo a este apartado: "Los cuerpos atrapados por el discurso". Lacan finaliza su Seminario, anticipándose de una manera impresionante a su época. La salida de la civilización patriarcal y, en su lugar, el advenimiento de una sociedad de hermanos, de una fraternidad sin Otro, devela lo que también leemos en "Televisión", un año después: "[…] en el extravío de nuestro goce, solo el Otro lo sitúa, pero es en la medida en que estamos separados de él".[5]

Lo que se constata en la clínica, y también en los fenómenos sociales, es esta lógica que Lacan desarrolla: el parlêtre ignora, desconoce, no sabe lo que es el goce con el cual se podría orientar, solo sabe rechazar el goce del otro. Siempre yace, en una comunidad humana, el rechazo de un goce inasimilable que, sin embargo, es lo más propio.

Podríamos agregar que la manera de concebir el síntoma y el fantasma desde el psicoanálisis responden también a esta concepción de lo extranjero y lo éxtimo. En el corazón de su ser, se encuentra con un extraño que le es familiar: su síntoma. Por su parte, sabemos que "el fantasma del sujeto es lo que le resulta más familiar en su imaginario, pero el encuentro real con el goce siempre está marcado por un mal encuentro, ya sea en más o en menos".[6]

Extimidad

Si bien decimos que el Otro no existe, la pasión que apunta por excelencia al ser del Otro es el odio. Porque no se entretiene con sus atributos, apunta a lo real. Tal como dijimos, el odio es primero en relación al amor. Miller desarrolla especialmente esta perspectiva en su curso Extimidad al abordar la cuestión del racismo.

Me interesa subrayar el rasgo de fractura constitutiva de la intimidad, como lo señala allí Miller, que hace que pongamos lo éxtimo en el lugar donde se cree reconocer lo más íntimo, paradoja ineliminable. Se podría decir, tomando su referencia a la novela de Stendhal, La cartuja de Parma,donde los personajes conversan consigo mismos, diálogos íntimos de sus desventuras amorosas que en su completud narcisista complacen al lector. En el psicoanálisis, no se encuentra ese encanto, no se trata de las delicias de la intimidad y del amor, más bien, lo que se revela en un análisis es cómo en su fuero más íntimo el sujeto descubre otra cosa.

Pienso que el neologismo de Lacan odioamoramiento en sí mismo señala exactamente su extimidad. Abordar esta paradoja se vuelve necesario para el analista en su práctica y en el modo en que interpreta lo social, incluso si cuenta con la posibilidad de incidir allí.

NOTAS

  1. Lacan, J., (1972-1973) El Seminario, Libro 20, Aún, Buenos Aires, Paidós, 1998, p. 110.
  2. Lacan, J., (1957) El Seminario, Libro 1, Los escritos técnicos de Freud, Buenos Aires, Paidós, 1981, p. 394.
  3. Entrevista a Eric Laurent, Boletín hacia el IX ENAPOL. Recuperado en https://enapol.com/ix/portfolio-items/boletin-oci-3-entrevista-e-laurent-parte-1/. Oct. 2023
  4. Lacan, J., (1971-1972) El Seminario, Libro 19, … o peor, Buenos Aires, Paidós, 2012, p. 231.
  5. Lacan, J., Otros escritos, Buenos Aires, Paidós, 2012, p. 560.
  6. Laurent, E., "El extranjero éxtimo", Lacan Quotidien, n.º 770. Recuperado en https://www.wapol.org/es/global/Lacan-Quotidien/LQ-770-BAT.pdf. Oct.2023